06 agosto 2009

Words meet heartbeats.

Siempre odié que me conociera tan bien como para llegar al punto exacto de hacerme explotar.
Sin embargo jamás pensé que aquella forma de conocerme fuera tan única, como para hacerme sonreír.
Sí, me hizo sonreír, y aunque no lo sepa ni se lo diga, lo sigue haciendo, y yo no sé aún como la logra.
Las frases sobran y la adrenalina me devora.
Me tomé un respiro para darle mis palabras.
Y quisiera un par de minutos más, pero ya los tendré luego.
Ahora corro como en estos días, pero con una sonrisa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario